martes, 5 de enero de 2010

8 BITS I : BARCODE BATTLER


¿Alguein recuerda este "armatoste"? Probablemente a muchos de vosotros ni os suene el nombre. Por aquel entonces, nuestro pobre nivel de ingles nos hacia pensar que el artefacto en question se llamaba "Barco de Battler" (en lugar de "Barcode Battler")... luego descubriamos que poco tenia de "Barco" y que, desgraciadamente, poco tenia tambien de videojuego.

El "Barcode Battler" fue un engendro que se quedaba a medio camino entre los primeros videojuegos portatiles y lo que serian las reinas de la diversion portatil a 8 bits: "Game Boy" (Nintendo) y "Game Gear" (Sega). El post de hoy va dedicado a este extraño artilugio que llego a nuestras casas a principios de los 90 y que, hoy en dia, es una rara pieza en el museo de las consolas (aunque es relativamente sencillo encontrar algun modelo de estos periodicamente por e-bay). Ahi vamos....

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-BARCODE BATTLER: EL CONFLICTO DEL COMERCIO-




Pocas maquinas son tan raras en el mundo del videojuego como esta extraña especie de consola que llego a España alla por el año 1992. Por aquel entonces, Nintendo ya habia sacado su consola portatil "Game Boy" y Sega habia hecho lo propio con su "Game Gear", que se las prometia mas felices a los usuarios por disponer de pantalla a color y adaptador para ver la Tv donde quisieras (bueno, eso ya es tema de otro post...). Fue por aquel entonces cuando aparecio anunciado en las revistas especializadas de la epoca ("Hobby Consolas" o "Micromania") un extraño aparato que prometia horas de diversion por un precio mucho mas asequible que el de cualquiera de las otras consolas y su estitca no invitaba a pensar que se tratase de otro de aquello videojugos que, por la peoca, ya estaba muy obsoletos.





Esta consola llegaba con el abal del pais que habia parido Nintendo (Japon) donde la 'maquinita' en question gozaba de gran popularidad. De hecho, en España se comercializo la "Barcode Battler II", la primera version del juego ya habia salido en marzo de 1991 en Japon con excelentes resultados en ventas. "Barcode Battler" llego a nuestro pais sin ofrecer nada, y a la vez, ofreciendo mucho. La "consola" carecia de graficos, no tenia sonido (excepto algunos molestos pitidos duante el combate) y ademas, no permitia intercambiar cartuchos, habia que ceñirse a un solo juego. Dicho lo cual, "Barcode Battler" no parecia tener muchos atractivos que hiciesen merecer la compra (creo que unas 5.000 pesetas) pero por otro lado, y este fue su punto de innovacion fuerte, la consola funcionaba con simples codigos de barras. ¿Para que comprarse un caro cartucho si podias irte al mueble de la cocina, coger la primera caja de galletas, y con suerte, conseguir un fiero guerro o un diestro mago?



Y es que el 'aparatito' en question contenia una serie de tarjetas (como la de la imagen) con guerreros, magos, enemigos, armas, hechizos, etc... Con su correspondiente dibujo por la parte delantera y la explicacion del personaje en la trasera junto con un codigo de barras que se hacia deslizar por el lector de la consola y..."viola!"... ya estabas listo para jugar. Luego, el juego se trasformaba en un simple combate a turnos entre la maquina y el jugador. El personaje iba atravesando una serie de "salas" (virtuales eso si, en la pantalla solo aparecian numeros) en donde se iba encontrando con distintos enemigos (mas o menos poderosos) y entonces, comenzaba un monotono combate por turnos. La pantalla mostraba los puntos de vida de ambos adversarios, asi como los golpes y estadisticas... el mayor aliciente era el comentado anteriormente y era el de ir buscando en todos los productos y descubirir bajo que codigo de barreras se podia esconder un guerrero, un arma, un hechizero o un conjuro. Aqui teneis un video para que veiais como funcionaba la consola en question...







Yo compre esta consola a los pocos meses de salir al mercado. Aunque el juego no era ninguna maravilla y los recursos de la maquina era mas bien limitados, tengo que reconocer que me divertia bastante. Pasaba las tardes muertas al regresar del cole rebuscando entre los productos de cocina, comestibles, cintas de video o libros (no respetaba nada). Me envolvia un extraño sentimeinto de emocion mientras pasaba aquellos recortes por la maquina esperando encontrar el arma definitva o el guerrero invencible que seguro, al descubirilo, ni hubiese jugado con. el.. pero lo tenia. Las tijeras y cualquier cosa con barras identificativas fueron mi diversion durante muchas tardes de 1992.




Obviamente, a la consola no le servia cualquier codigo. Digamos que funcionaban algo menos de la mitad de los que se probaban, aunque debo admitir, que pocas veces uno descubria algo que mereciese realmente la pena. Cualquier cosa que leia el lector lo interpretaba con unos valores realmente pobres. Ese fue uno de los motivos de su rotundo fracaso, a la vez que la consola no consigio calar entre los guston de los que eramos niños entonces en parte por la dura competencia de sus rivales, como porque el "rol" no era tan seguido entonces. Nosotros preferiamos la accion a la meditacion, lo pragmatico a lo teorico y lo simple a lo complicado. Todos estos ingredientes (que no son pocos) hicieron que "Barcode Battler" pasase por nuestro pais con unas ventas discretas (aunque para nada desdeñables) y que se borrase de nuestras mentes tan pronto como se la regalamos al primito o la guardamos en algun cajon para no hacerlo en la memoria.
A pesar de todo, en Japon tuvo bastante exito, con sus dos versiones distintas y con los adaptadores que se vendieron para "SuperNintendo". Tambien se publicaron sets de cartas especificos de los personajes de "Super Mario" o "Zelda". Pero eso ya es otra historia que no nos importa...





Hasta aqui el post de hoy. Como siempre, espero que os haya gustado, y sobretodo, que os haya ayudado a recordar. Creo que, tristemente, cuando desaparecio de mis prioridades "Barcode Battler" tambien lo hizo algo tan cotidiano hasta entonces: Recortar. Creo que jamas que vuelto a hacerlo... Un saludo del Raposu

1 comentario:

Fonnus dijo...

Yo mismo la tengo todavía. Me parece una autentica rareza dentro del mundo del entretenimiento. Ayer mismo la volví a sacar de la caja. Toda ella llena de códigos recortados a los que les habíamos hecho sus dibujitos y todo.
Graxias por el reportaje.